Infante Don Enrique

Marzo, 1394 (Porto, Portugal) – Noviembre, 1460 (Algarve, Portugal)

La suite Deluxe con vistas, Don Enrique, el Infante de Sagres, dispone de 60 m² de encanto clásico y comodidad para un máximo de dos huéspedes. Esta espaciosa suite cuenta con dos camas individuales, una acogedora sala de estar con techo ornamentado y una espectacular lámpara de araña, así como con una pequeña cocina para mayor comodidad.

La elegante decoración se complementa con un amplio cuarto de baño con detalles en madera en el techo, una generosa ducha y acabados refinados. Desde la suite, disfrute de las vistas de la ciudad en un ambiente cálido y acogedor. Las comodidades incluyen una cafetera Delta, minibar, TV, conexión Wi-Fi gratuita, aire acondicionado, secador de pelo y caja fuerte. Durante su estancia se le proporcionará café y agua de cortesía.

Descubra el resto de nuestras habitaciones de la categoría Suite Deluxe con vistas.

Infante Don Enrique - Torel Palace Lisbon
Infante Don Enrique - Torel Palace Lisbon
Infante Don Enrique - Torel Palace Lisbon
Infante Don Enrique - Torel Palace Lisbon

En Honor a...

Don Enrique, el Infante de Sagres

Infante Don Enrique - Torel Palace Lisbon

Don Enrique de Avis, quinto hijo del Rey Juan I y Doña Filipa de Lencastre, fue un infante portugués y miembro de la Ínclita Geração. Recibió una educación ejemplar, pero extremadamente religiosa.

Don Enrique fue la fuerza impulsora más importante detrás de la Era de los Descubrimientos y se hizo popularmente conocido como el “Infante de Sagres” o “El Navegante”.
Fue comandante de la conquista de Ceuta junto a su padre. Durante su vida, mientras lideraba expediciones en el Atlántico, se redescubrieron los archipiélagos de Madeira y las Azores y la isla de Cabo Verde.

Sin embargo, en 1437 dirigió la expedición de Tánger en Marruecos, que resultó ser un fracaso, ya que su hermano menor Fernando fue retenido como rehén en Marruecos hasta su muerte en 1443 como garantía de la devolución de Ceuta, que nunca se produjo. Esto supuso un duro golpe para el prestigio y la reputación de Don Enrique.